Justo en el mismo lugar donde se alzaba el concurrido Corral del Príncipe, amante de comedias y representaciones teatrañes, se levanta hoy el Teatro Español.
Cuentan las crónicas que el Corral (y luego Teatro) del Príncipe empezó a edificarse en mayo de 1582 y fue inaugurado el 21 de septiembre de 1583. Por aquellos entonces, el nuevo local era propiedad de la Cofradía de la Pasión y la Soledad.
En 1600 se le añadiría una planta más, y entre 1627 y 1636, otras dos, incorporando en este caso los aposentos laterales, evidentes prefiguraciones de lo que luego serían los palcos.
De todos los contratiempos y transformaciones que ha sufrido el Teatro Español, fueron los incendios de 1802 y 1975 los más importantes.
En 1802, un gran incendio dejó apenas la fachada en pie. El encargado en reconstruirlo fue Juan de Villanueva. La fachada neoclásica del actual edificio -con no pocos retoques a causa de incendios sucesivos- es responsabilidad suya.
El de 19 de octubre del año 1975 un nuevo incendio, producido en medio de una representación, destruyó el escenario y parte de la sala. Se perdió la histórica araña que colgaba del techo. Se pudo realizar una reconstrucción, bajo la dirección de Luicio Oñoro pero respetando el trabajo de Villanueva.
En 1981 volvió este histórico edificio al ayuntamiento de Madrid, que desde 1627 ostentaba la propiedad,casi sin interrupción desde entonces..
Se incorporó entonces a la fábrica originaria el edificio colindante -un tercio en superficie del total del teatro en la actualidad. La última gran reforma del Teatro Español -¡la número 14!-, data de 1995. Posteriormente, en marzo de 2004 se reabrió el foso de orquesta, que había quedado sepultado en anteriores reformas.En febrero de 2006 se hace la última intervención en el edificio para adecuar las instalaciones y las zonas públicas del teatro a la normativa de protección contra incendios.
El dorado y el rojo dominan el teatro, que tiene un aforo de 740 localidades, distribuido en tres pisos. Preside la sala una gran lámpara de cristal (de 2,7 x 2 metros) con cincuenta luces. Es una réplica, ya que en el incendio de 1975 se destruyó. En su origen era una lámpara de aceite, y que bajaba y subía para su encendido, a menudo con el público presente y recibiendo goterones de aceite en su traje (lamparones).
Dos palcos del primer piso, gemelos y uno enfrente del otro, sobre el proscenio, estaban reservados (hoy no se usan) al Rey (a la derecha de los espectadores) y al Alcalde (a la izquierda). Se distinguen por sus escudos.
En 2005 se inauguró la Sala Pequeña (Sala Margarita Xirgu) con un aforo de 107 butacas situadas sobre gradas, de este modo el espectador se sitúa con gran proximidad al espacio escénico.
TEATRO ESPAÑOL – Sala Principal
El Espacio Andrea D’Odorico es una sala polivalente, utilizada principalmente como sala de exposiciones, conferencias, y ruedas de prensa.
El 9 de marzo de 2015 se inauguró el Espacio Pérez Galdós: Lugar de encuentro destinado a dinamizar la vida cultural del teatro y de las actividades complementarias de la programación. Diseñado por el escenógrafo Ricardo Sánchez Cuerda, el elemento unificador del espacio es el clásico telón de terciopelo granate. Completa la decoración un panel con 37 nombres de figuras relevantes que están unidas a la historia de este teatro y que recogen el espíritu de los más de cuatrocientos años que han transcurrido desde sus orígenes.