
presenta
Laponia es una comedia que os hará pensar y reír a la vez que os planteará diferentes situaciones éticas y morales que nos podrían pasar a todos. Esta propuesta de Cristina Clemente y Marc Angelet (UNA TERAPIA INTEGRAL)crea un intenso debate sobre las tradiciones, los valores familiares y aquellos secretos inconfesables.
Mónica, Ramón y su hijo de cinco años, Martí, han viajado a Finlandia para pasar las fiestas de Navidad con la hermana de Mónica, Nuria, su compañero finés y la hija de los dos, Aina, de cuatro años. El pequeño Martí está ilusionado, en Finlandia podrá ver al Papá Noel de verdad.
La velada entre dos familias se presenta idílica, una casita en medio de abetos nevados, hogar de fuego, trineos en la puerta, entorno familiar plácido… Pero todo se estropea cuando Aina explica a Martí que Papá Noel no existe, es un personaje que se inventaron los adultos hace tiempo para coaccionar a los niños y que se portaran bien.
Bien es verdad que es imposible que un solo hombre reparta regalos a todos los niños del mundo en una sola noche. El disgusto de Martí es grande, pero todavía lo es más el de sus progenitores. Para Mónica y Ramón mantener la ilusión de su hijo es una de las máximas de Navidad.
A partir de este hecho, las dos parejas contrapondrán dos maneras de educar a los hijos totalmente opuestas, debatirán sobre la verdad y la mentira, las tradiciones, los valores familiares, e inevitablemente saldrán a la luz secretos del pasado que nadie quería desenterrar.
LAPONIA es una comedia que nos hará pensar y reír a la vez que nos planteará diferentes situaciones éticas y morales que nos podrían pasar a todos. Esta propuesta de Cristina Clemente y Marc Angelet crea un intenso debate sobre las tradiciones, los valores familiares y aquellos secretos inconfesables.
¿La verdad es tan buena como dicen y la mentira tan mala? Laponia nos plantea este debate tan recurrente en nuestros días a partir del humor y la comedia. Una obra brillante que, con este debate como protagonista, nos mantendrá atentos y en constante evolución mental y psicológica sobre la butaca.




Amparo Larrañaga, Mar Abascal, Iñaki Miramón y Juli Fàbregas entablan un debate humorístico a calzón quitado entre posiciones racionalistas e idealistas en una función dirigida por Tamzin Townsend a la que cabe augurar largo tiempo en cartel. BABELIA / EL PAIS ⭐️⭐️⭐️⭐️
Hay enredo, discusiones, secretos que salen a la luz, dilemas culturales y morales, y sobre todo humor, golpes y golpes de humor para que el patio de butacas se pase un rato entretenido. ABC ⭐️⭐️⭐️⭐️
¿La verdad es tan buena como dicen y la mentira tan mala? Laponia nos plantea este debate tan recurrente en nuestros días a partir del humor y la comedia. Una obra brillante que, con este debate como protagonista, nos mantendrá atentos y en constante evolución mental y psicológica sobre la butaca. #REVISTAGODOT ⭐️⭐️⭐️⭐️
En la comedia ‘Laponia’ hasta los finlandeses tienen gracia. Dirigida con sencillez y discreción por una clásica del género como Tamzim Townsend, la obra se apoya en cuatro comediantes fabulosos y con oficio. #ELESPAÑOL ⭐️⭐️⭐️⭐️
Reparto: Amparo Larrañaga, Iñaki Miramón, Mar Abascal y Juli Fàbregas.
Autoría: Marc Angelet y Cristina Clemente
Dirección: Cristina Clemente y Marc Angelet
FICHA TÉCNICA
Producción ejecutiva: Verteatro
Dirección de producción: Carlos Larrañaga
Diseño escenografía: Anna Tusell
Diseño iluminación: David González
Diseño sonido: Manuel Solís
Diseño vestuario: Ángel Plana
Ayudante de dirección: Elena Mateo
Ayudante de producción: Beatriz Díaz
Dirección técnica: David González
Construcción escenografía: Mambo Decorados
Prensa: La Cultura a Escena – Ángel Galán
Fotografía: David Ruano
Vídeo y fotografía de escena: Nacho Peña
Diseño gráfico: Hawork Studio
Gerencia y regiduría: Ángel Plana
Pasable gracias a la buena interpretación de los cuatro actores, de los que he destacar una dicción casi perfecta, por desgracia cosa rara en estos momentos.
La obra en sí es bastante flojita, no sé si es cosa de libreto o más bien de dirección. Lo que sí tengo claro es que podría dar mucho más de sí con el tema que maneja.
Durante gran parte del tiempo la obra se centra más en los «jiji jaja» de los típicos tópicos de pareja que en el tema principal de la trama (bastante interesante).
Pero eso, los tópicos vacíos y repetitivos, ya me he dado cuenta que le hace mucha gracia a parte del público actual de teatro, más acostumbrado por desgracia a los monólogos pseudo graciosos que a la dramaturgia con mayúsculas.
Una pena, pero que deberían de pensárselo más la gente del teatro, porque si alguien es responsable son ellos.