Producciones Rocambolescas
presentan
Dramaturgia y dirección Carolina Román
Del 12 al 30 de julio
Se estrenó en la Sala Margarita Xirgú JUGUETES ROTOS, escrita y dirigida por Carolina Román. Una historia sobre la transexualidad en la España de posguerra que “rompe una lanza a favor de lo diferente”. Tras llenar en gira y llevarse varias nominaciones a los Premios Max (además de ser elegida por los lectores de MADRIDESTEATRO -donde arrasó en las votaciones- como METjor obra, actor, actor de reparto y dirección) regresa a Madrid.
Quiero mirarme al espejo y reconocerme en él, mirar mi cuerpo y no odiarlo. Es más, quiero amarlo lo suficiente como para dejarlo volar libre como las palomas. Porque mi casa es mi cuerpo, y si se cae a pedazos no lo abandono, todo lo contrario, refuerzo sus cimientos para que resista todos los temporales, para albergar todo lo que lo embellezca y así poder habitarlo, recibir a mis huéspedes y llenar cada estancia con mi voz, por fin mi propia voz. Porque si no lo hago seré ese fantasma habitando el cuerpo de un juguete roto, seré esa criatura extraña empujada a deshabitarse, y no quiero, y no debo.
De esta manera nos cuenta Carolina Román la historia de Mario que trabaja en una oficina y un día recibe una llamada que le cambiará la vida para siempre… A partir de ese momento, viajaremos a su infancia, habitaremos su casa, recorreremos su pueblo. Pinceladas en blanco y negro que truncarán su identidad sexual y de género.
Me adentré en el mundo trans con la ayuda de Equipo Centro de Madrid, donde me formé como terapeuta gestáltica. Contacté con Maite (antes Juan) y de su mano transité una montaña rusa de emociones: su niñez afectada por el bullying, la toma de conciencia del deseo de ser mujer; la transformación total para poder salir al mundo y enfrentarse con los muros reales. Sin embargo el argumento no es su biografía. Preferí traer a la palestra otras voces pertenecientes a otras épocas en donde era aún más difícil asumirse, mostrase, ser.
Durante este proceso apareció una pregunta: ¿dónde quedaron esas personas que no pudieron asumir su verdadera sexualidad reprimida por una España franquista y negra? ¿Qué pasó con los que no tenían cabida en el mundo del espectáculo? Me interesa contar esta otra parte: los que no pudieron salir de sus propias jaulas, los que no se atrevieron y los que sí lo hicieron. En esta historia decidí que la protagonista saliera «empoderada» hacia la luz, y segura de ser quien es. fueron de gran utilidad los foros de padres de hijos transexuales como Asociación Daniela o Chrysallis, para entender que aún hay mucho por hacer como sociedad para darle cabida a este mundo “no binario” como la filósofa transexual y feminista Paul B. Preciados. Ellos han abierto ante mí un mundo un viaje que me colocó frente a mis propios limites. «Juguetes rotos» es principalmente una lanza a favor de lo diferente.
Carolina Román
Cuidada, hermosa y tierna la «flor de otoño» de Carolina Román, donde Nacho Guerreros se licencia y Kike Guaza arrasa
Autor y Dirección: Carolina Román
Diseño de escenografía: Alessio Meloni
Diseño de iluminación: David Picazo
Diseño sonoro: Nelson Dante
Diseño de vestuario: Clara Bilbao
Diseño de caracterización: Chema Noci
Ayudante de Dirección: Diego Sabanes
Fotografías: Sergio Parra
Interpretación: Nacho Guerreros y Kike Guaza
Producción: Una Producción de Producciones Rocambolescas
¿Por qué no ponen lo que dura la obra? Es una información sencilla, barata, interesante…
Porque dicha información, cuando se hizo la noticia de la obra, no se sabía, porque es estreno y han estado ajustando.
Ayer estuve viendo la obra y me conmovió de principio a fin. No hay palabras para describir el trabajo de esos actores sobresalientes, la puesta en escena y todo lo que sucede en el escenario. Mientras asistía a la representación se me iban despertando algunas evocaciones de tiempos pasados, había momentos que me hacían recordar algo que en su momento me marcó. Hasta que descubrí que había retazos en la obra que me recordaba la película de Ocaña, retrato intermitente de Ventura Pons. No sé si la autora la conocía y se habrá inspirado en ella, pero en todo caso fue una película rompedora en su época (1978), que dio a conocer los padecimientos de los que se sentían y eran diferentes.