LA MÁQUINA DE TURING en los Teatros del Canal

NOCHE DE DIFUNTOS en el Teatro Fernán Gómez
22 julio, 2020
ASESINOS TODOS, el regreso de Carlos Sobera; Teatro Reina Victoria
23 julio, 2020

TEATROS DEL CANAL

Producciones Teatrales Contemporáneas

presenta

LA MÁQUINA DE TURING

De Benoit Solès y dirección de Claudio Tolcachir

del 22 de octubre y el 15 de noviembre de 2020

Inspirado en Breaking The Code, de Hugh Whitemore, basada en Alan Turing: The Enigma, de Andrew Hodges   

Manchester. Invierno de 1952. Tras haber sufrido un robo en su casa, el profesor Turing presentó una denuncia en la comisaría. Debido a su aspecto poco convencional, al principio el sargento Ross no lo toma en serio. Pero su presencia no escapa a los servicios secretos. Y por una buena razón, Alan Turing es un hombre con muchos secretos… Desde su increíble determinación de descifrar el código «Enigma», hasta su carrera irreprimible para entender el «código» de la naturaleza, descubrimos a un hombre atípico y entrañable, inventor de “Una máquina pensante”, auténtica génesis de la inteligencia artificial y las computadoras…

Marcado para siempre por la muerte de su amigo de la infancia, Christopher, Alan Turing finalmente será condenado por homosexualidad y terminará sus días, al igual que Blancanieves, comiéndose una manzana envenenada… Aquí está el extraordinario destino de un genio que permaneció injustamente en la sombra y que fue aplastado por la bien pensante maquinaria de la Inglaterra de los años cincuenta.

¡Un hombre que había cambiado el mundo!

Breaking The Code

El nombre de Alan Mathison Turing (1912-1954) suele recordarse con admiración en el ámbito académico pues está asociado con investigaciones pioneras en campos como la lógica matemática, el nacimiento de la informática o la inteligencia artificial, el descifrado de las máquinas Enigma, con trabajos novedosos en morfogénesis y otros casi desconocidos en teoría de la probabilidad y estadística. El recuerdo cambia, según percepciones, al referirse a su vida privada, sobre todo por su juicio y condena por homosexualidad y su temprana muerte por suicidio mordiendo una manzana envenenada con cianuro. 

La figura de Turing es sin duda controvertida y para un personaje de su talla son pocos los libros dedicados a glosar su vida y obra. De hecho, hasta 1983, cuarenta años después de su muerte, no se publicó una completa y documentada biografía: Alan Turing: The Enigma, un libro de Andrew Hodges que se ha convertido en la referencia indispensable sobre la vida del matemático. 

El dramaturgo y guionista británico Hugh Whitemore escribió su obra de teatro Breaking the Code basándose en el libro de Andrew Hodges. La obra se estrenó el 15 de septiembre de 1986 en el Yvonne Arnaud Theatre, en Guildford, con Sir Derek Jacobi interpretando el papel de Alan Turing. Poco después pasó a representarse en Londres y, también con Jacobi como actor principal, en Nueva York en 1987. La producción de Broadway fue candidata a los premios Tony Awards y Drama Desk Awards. En 1995, The Drama House y la cadena de TV WGBH de Boston realizaron una reducida adaptación televisiva para la BBC británica. 

Hugh Whitemore: «Una obra de teatro puede tener éxito sin necesidad de renunciar a nada y sin tener que pedirles a las personas del público que dejen sus cerebros junto a sus sombreros en el guardarropa cuando entren en el teatro». 

Cuenta Hugh Whitemore que, poco antes del estreno, Sir Derek Jacobi entró en pánico al temer que las numerosas y prolijas explicaciones matemáticas contenidas en la pieza pudiesen aburrir a la audiencia y arruinar la representación. La reacción del público fue la contraria, pues Jacobi consiguió transmitir la pasión que un matemático siente, y la pasión con la que un matemático habla de su trabajo. Whitemore realizó un excelente trabajo de documentación matemática y no dudó en introducir en la obra, con notable profundidad, las reflexiones científicas y filosóficas necesarias para poner en contexto las contribuciones científicas de Turing. 

Pero Hugh Whitemore fue más ambicioso y la obra, además de acercar la figura, el trabajo y la tragedia personal del extraordinario matemático que fue Alan M. Turing, ofrece diversos planos de interpretación del significado de su propio título, Breaking the Code (literalmente, «Rompiendo el código»). 

Ciertamente, Turing rompió el código nazi de las máquinas Enigma. Pero Turing también vulneró el código de la moral sexual imperante con su abierta homosexualidad. Ello le llevó a infringir el código de la ley. Más aún, como apunta Stephen Hawking, Turing transgredió un código social muy arraigado en la sociedad británica de la época: «Lo peor, quizá, fue que traspasara la jerarquía social y que intimara con alguien de la clase obrera». Y, finalmente, Turing contravino el código ético-religioso al suicidarse (su madre, ferviente creyente, mantuvo siempre la teoría de la muerte accidental). 

Además, el contraste entre el Turing inocente, vulnerable e ingenuo en sus asuntos personales frente al genio científico permite a Whitemore indagar en el conflicto entre pensamiento y sentimiento. Y utiliza como metáforas algunos conceptos extraídos de artículos de Turing. 

En su artículo Computing Machinery and Intelligence, Turing defendió la idea de que el cerebro humano era, básicamente, una computadora digital y que, por tanto, una máquina computadora podría, en un futuro tal vez no muy lejano, imitarlo y «pensar». Así, en Breaking the Code algunos humanos se comportan como máquinas, siguiendo a rajatabla su «programa»: sea éste la ley, como para el sargento Ross, o las normas de seguridad nacional, como para el agente de inteligencia Smith. 

El trabajo de Turing en On Computable Numbers estableció un límite para el poder de las matemáticas, de las computadoras digitales, para decidir sobre la verdad o falsedad de una proposición. Y la obra rebosa de referencias al dilema moral entre la verdad y la mentira. Turing afirma: «Es un artículo técnico de lógica matemática, pero también trata de la dificultad de discernir entre lo cierto y lo falso». Christopher Morcom es tajante: «No debió haber mentido, fue un grave error. Tengo las ideas muy claras acerca de lo que es bueno y lo que es malo, y mentir es siempre malo». Turing inicialmente miente a la policía, aunque luego cuenta la verdad. Ron miente a Turing acerca del robo del dinero en la cartera. El agente del servicio secreto miente a Turing. Knox regaña a Turing por su indiscreción sexual pero le oculta su propia homosexualidad porque, en su opinión, decir la verdad puede ser muy doloroso para los otros: «Cuando usted revela su naturaleza sexual, no puede ignorar el efecto que inevitablemente tendrá en las personas». ¿Codificar un mensaje no es simplemente ocultar la verdad? No obstante, como sentencia Turing: «A la larga, no es descifrar el código lo que importa… es el camino que tomas después. Ése es el verdadero problema». 

Equipo artístico

AUTOR: BENOIT SOLÉS (inspirado en la obra de Hugh Whitemore Breaking The Code, basada a su vez en Alan Turing: The Enigma, de Andrew Hodges)      INTÉRPRETES: Daniel Grao y Carlos Serrano DIRECCIÓN: Claudio Tolcachir ILUMINACIÓN: Juan Gómez Cornejo DISEÑO DE ESCENOGRAFÍA Y VÍDEO: Emilio Valenzuela PRODUCCIÓN EJECUTIVA: Olvido Orovio DIRECCIÓN DE PRODUCCIÓN: Ana Jelín PRODUCCIÓN Y DISTRIBUCIÓN: Producciones Teatrales Contemporáneas

¿tú qué opinas?

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.