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PRODUCCIONES ANADRAMÁPETE
presenta
escrita y dirigida por Manuel Calzada Pérez
a partir de EL REY LEAR de William Shakespeare
Del 2 de marzo al 2 de abril
El 2 de marzo se estrena en la Sala Arapiles 16 EL REY LEAR Y YO escrita y dirigida por Manuel Calzada Pérez a partir de EL REY LEAR de William Shakespeare.
Manuel Calzada Pérez autor de `El diccionario´ premiada con el Premio Nacional de Literatura Dramática, estrena su nuevo texto EL REY LEAR Y YO con Helio Pedregal y Begoña Valle como protagonistas.
Un teatro de palabra, una obra inabarcable, un homenaje al teatro y a los actores. Shakespeare y El Rey Lear y yo se puede ver de miércoles a domingos en la Sala Arapiles 16.
Al repartir su reino entre sus hijas, el viejo Rey Lear cometerá el error de repudiar a la única sincera, sin darse cuenta de que las palabras son un arma de doble filo. Ese error lo arrastrará a través del abandono, la miseria y la locura por el duro camino que conduce a la sabiduría. Su única compañía: un pobre bufón que no sabe mentir.
Un viejo actor tiene una cuenta pendiente con “El Rey Lear” y con la vida. Con ayuda de su compañera, ensaya la función para poder llegar a saldar esa deuda algún día y reconciliarse con su hija. Ríen, lloran, bromean y combaten, como en todo buen teatro. Pero el personaje de Shakespeare es descomunal y la vida demasiado pequeña.
¿Qué hacer con la realidad cuando el teatro es el único refugio posible? ¿Se puede aprender la lección de Lear antes de que se nos haga tarde?
El ensayo de hoy será definitivo.
Una historia de amor al teatro. Un personaje inmenso que exige un actor extraordinario. Una obra sobre la palabra como arma intrínsecamente humana. Una apuesta por la ternura y por el arte como camino de redención de nuestra terquedad.
Cuando te dan un premio importante, puede pasar que te amarguen la vida para siempre. A mí por poco me ocurre. Después de la obra El diccionario, premiada con el Premio Nacional de Literatura Dramática, ¿qué más puede uno escribir tras tanta mayúscula que aguante la comparación, no sólo del público, sino de uno mismo? Te respondes que tienes que seguir siendo fiel a ti mismo; que tú no eliges las historias, sino ellas a ti; que cada momento tiene su expresión… y cada vez te hundes más en la miseria.
Hasta que, puestos a retos imposibles, decides no medirte con tu obra anterior, sino con el más grande dramaturgo de todos los tiempos: William Shakespeare. Podrá parecer un acto de arrogancia, pero en mi caso ha sido una estrategia de salvación. En un duelo así la partida está perdida de antemano, salvo que uno se tome a su adversario como un maestro y tú, modesto aprendiz, te acerques a él para sumergirte en el misterio que encierra cualquier obra maestra, a ver si se te pega algo. Perdón, cualquiera obra maestra, no: El Rey Lear.
El Rey Lear es la obra más difícil de Shakespeare y a mi juicio la de estructura más penetrante en la exploración del ser humano. Casi nada. Un rey todopoderoso que decide “arrastrarse ligero de equipaje hacia la muerte” y da todos los pasos para avanzar hacia su propia destrucción. Ante este reto hercúleo, este pobre aprendiz ha colocado a sus dos personajes frente a un reto parecido: dos viejos actores venidos a menos que insisten una y otra vez en ensayar su parte en esta obra con la obstinación de los que necesitan sobrevivir. Empresa bella y ridícula, no exenta de patetismo encubierto por la carcajada o de esperpento revestido de tragedia. Y así, con más ganas de reír o de llorar, según se nos antoje, podremos compartir con ellos un viaje a la cocina de la creación, a la sala de ensayos, donde la vida se confunde con el teatro y el teatro la mejora hasta en sus propias calamidades.
Los que amamos este arte sabemos de su rara simetría con la vida, espejo deformante en el que nuestra humanidad se refleja descarnada pero tolerable. Este es el propósito de mis dos viejos actores: encarnar los personajes de Shakespeare para encontrarse a sí mismos sin zaherirse demasiado. Ojalá esta obra dispense al público aunque sea una dosis mínima de esta terapia.
Manuel Calzada
AUTOR, DIRECTOR Y ESPACIO Manuel Calzada Pérez
ILUMINACIÓN Raquel Vázquez Meleiro
VESTUARIO Alberto Sinpatrón
AYUDANTE DIRECCIÓN Jesús Sanz
FOTOGRAFÍA Carolina Galiano
DISEÑO PELUQUERÍA Y MAQUILLAJE Gema SanMartín
ASESOR MUSICAL José María Calzada
ASESORA TRADUCCIÓN María Calzada
COMUNICACIÓN Y PRENSA Josi Cortes Comunicación
REPARTO Helio Pedregal y Begoña Valle
Fechas y horarios: Del 2 de marzo al 2 de abril
de miércoles a sábado a las 20hs y domingos 19hs. en la SALA ARAPILES 16
Descargar DOSSIER
Web: elreylearyyo.com
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La obra es grandiosa, con un texto que es una historia dentro de una historia, que si cabe lo hace más conmovedor, y sobre todo más didáctico para entender a Sakespeare. Lo que más me sorprendió es la actualidad de la temática shakesperiana. Hace mucho tiempo que no estamos ante una obra tan comovedora.
Espléndida. Es teatro del bueno en una época muy dada a las banalidades. Por eso sorprende tanto. Hace falta mucho talento, esfuerzo y coraje para crearla y luego dirigirla. Y hace falta el mismo talento y valor para representarla con tanta fuerza y sensibilidad.
Helio y Begoña son muy grandes y están sublimes. Manuel es definitivamente genial.
No es posible, pero para evitar la censura, desembolsa en teatro del bueno. ¿Vale?