Compañía Nacional de Teatro Clásico, Cabosanroque, Temporada Alta de Girona, Departament de Cultura i de l’Institut Català de les Empreses
presentan
de Cabosanroque. Diálogo contemporáneo a partir de El gran teatro del mundo
Del 31 de octubre al 17 de noviembre de 2024
Casi 400 años más tarde, vuelven a llegar al escenario los cuatro carros que cargaban las escenografías de El gran teatro del mundo. Dentro llevan, como antaño, pedazos de naturaleza y artefactos de magia escénica, peñascos y montes que se convierten en grutas, escenarios y maquinaria como los descritos por Calderón de la Barca en las memorias de apariencias de cada auto sacramental.
El castor que lloraba es un diálogo contemporáneo creado a partir de El gran teatro del Mundo de Calderón de la Barca.Se trata de una sorprendente propuesta escénica a medio camino entre la instalación artística y el espectáculo audiovisual, en la línea habitual de Cabosanroque pero incorporando en esta ocasión un importante contenido textual.El espectador recorre física y sensorialmente el espacio escénico convirtiéndose en parte fundamental del montaje.
El mundo sigue siendo un gran teatro, y así va a ser representado, a través de un juego teatral, pero sus personajes ya no son los mismos. Estamos en tiempos del Antropoceno, la naturaleza agoniza, hemos leído a Nietzsche, y el Autor, el Mundo y los hombres han cambiado de manera irreversible.
Dos obras diferentes se superponen aquí: la que sucede dentro de las cuatro cajas, con un grupo de espectadores sobre el escenario, y la que escucha otro grupo desde platea a través de auriculares. Los hombres, tal y como decidió Calderón, serán espectadores y personajes a la vez. En mitad de la obra, los papeles se intercambiarán. Palabra, imagen y sonido están desencajados, y el espectador no podrá resolver la fricción entre naturaleza y artificio hasta que haya completado los dos papeles diferentes.
Cabosanroque sigue investigando sobre el formato teatral y cuestionando la relación del espectador con el escenario, esta vez reinterpretando el artefacto teatral de El gran teatro del mundo, en el que el teatro y el escenario son alegoría de la vida.
Naturaleza y artificio
El diálogo que propone El castor que lloraba pone el foco de atención sobre dos conceptos claves, la naturaleza y el artificio. Es una invitación a reflexionar sobre el papel del ser humano en un mundo cambiante donde “realidad” y “representación” se entrelazan, expandiendo la alegoría de Calderón hasta nuestro presente abordando también la emergencia climática
Como Cabosanroque explica « La investigación alrededor del tema de la naturaleza y el artificio nos acompaña desde hace más de diez años, con el sonido siempre situado en el foco, en el centro. Y si hay una manera recurrente en nuestro trabajo, es que el modo en que explicas algo (el cómo) ya sea aquello que explicas (el qué), así es que con nuestras manos (es decir, por la vía de mecanismos) decidimos construir el sonido de estas grabaciones lo más imitadas que pudimos. Y esta vez el sonido está tan en el centro que ha acabado escondido dentro de los carros de los autos sacramentales. Ya no hay más naturaleza. Hoy todo es artificio.”