Carlos Acosta, CBE (La Habana, 2 de junio de 1973) es un bailarín, actor, escritor y coreógrafo cubano, distinguido con el título de comendador de la Orden del Imperio Británico.
Acosta estudió ballet en la Escuela Nacional de Ballet de Cuba en la que tuvo a profesores que le influyeron como Ramona de Saá. En junio de 1991 se licenció con máximas calificaciones y recibió una medalla de oro.
Ha bailado con numerosas compañías, entre ellas la English National Ballet, el Ballet Nacional de Cuba, el Ballet de Houston y el American Ballet Theatre. Ha sido un miembro permanente del Royal Ballet de Londres desde 1998 y en 2003 fue promovido a principal bailarín invitado, una posición que redujo su compromiso con la compañía, permitiéndole concentrarse en una creciente agenda de apariciones internacionales como invitado y tours.
En 2014, recibió de la reina Isabel II de Inglaterra la medalla de Comendador de la Excelentísima Orden del Imperio Británico (CBE).
Al año siguiente se retiró del Royal Ballet y desde entonces, manteniendo una intensa agenda de presentaciones, «se ha dedicado a impulsar su fundación en apoyo a jóvenes talentos, a potenciar su academia» y su cuerpo de baile, Acosta Danza, con sede en Cuba.
Está casado y padre de tres hijas.
De 1989 a 1991, Carlos actuó en diversas compañías incluidas la Compagnia Teatro Nuovo di Torino en Italia, donde bailó al lado de Luciana Savignano, y la compañía del Teatro Teresa Carreño de Caracas, Venezuela.
Por invitación de Ivan Nagy, Carlos bailó en la temporada 1991/92 con el English National Ballet en Londres las Danzas polovtsianas de la ópera El príncipe Ígor; Cenicienta, con Eva Evdokímova y Ludmila Semenyaka; El Espectro de la rosa, Les Sylphides y como Príncipe en El Cascanueces con coreografía de Ben Stevenson.
En 1992 y 1993, fue miembro del Ballet Nacional de Cuba bajo la directora Alicia Alonso, llegando a ser primer bailarín en 1994. En octubre de 1993 y septiembre de 1994, fue de gira con la compañía a Madrid, España, donde bailó en los papeles de Albrecht en Giselle, Basilio en Don Quixote y Siegfried en El lago de los cisnes.
En noviembre de 1993, fue invitado por Ben Stevenson, director artístico del Ballet de Houston para ser primer bailarín; debutó en la compañía como el Príncipe en El Cascanueces.
Entre los papeles que siguieron cabe mencionar, entre otros:
En 1992, Carlos bailó en Royal Ballet, Covent Garden, bajo la dirección de Carlos Christ. Algunos de los papeles que representó fueron:
Llegó a ser principal bailarín invitado de esta compañía, de la que se retiró en 2015.